El Seguro pide una acción colectiva para paliar las drásticas consecuencias de las catástrofes naturales

-- Noviembre 10, 2022
-- INTERNACIONAL
-- Fuente: Inese.es

Con motivo de la conferencia COP27 en Egipto, GFIA hace un llamamiento a las partes para que den prioridad a la adaptación y a la creación de resiliencia a los impactos del cambio climático.

El impacto global sobre las personas, la salud, los bienes, las empresas y el medio ambiente de unos fenómenos meteorológicos extremos más frecuentes y graves está bien documentado. “Los seguros y los reaseguros desempeñan un papel fundamental a la hora de aceptar la transferencia de algunos de los riesgos que presentan estos fenómenos, pero la brecha entre la cobertura del (re)seguro y unas pérdidas económicas más amplias es significativa en muchas partes del mundo”, indica la federación.

Para cerrar esta brecha de protección es necesario reducir las pérdidas invirtiendo en medidas de adaptación que mitiguen el riesgo. Sin esto, “la brecha se ampliará y también el trauma para millones de personas”, se advierte.

“Construir y reconstruir mejores estrategias”

Para ayudar a la sociedad a adaptarse al cambio climático, GFIA promueve los siguientes principios clave para una construcción más resistente y sostenible:

Construir de forma más resistente diseñando los edificios para que soporten las fuerzas de la naturaleza previstas durante la vida útil de la estructura.

No construir en zonas de alto riesgo.

Cuando sea apropiado para los riesgos que se presentan, construir con materiales verdes y circularidad.

Apoyar una mayor resiliencia mediante infraestructuras defensivas y una adecuada planificación del uso del suelo y de la ubicación de los edificios.

Como ponen de manifiesto los últimos acontecimientos, es urgente que todas las partes interesadas colaboren para prevenir las pérdidas debidas a un mal uso del suelo, de los códigos de construcción y de las infraestructuras. Por ello, GFIA hace un llamamiento a las partes interesadas para que se unan a las (re)aseguradoras en sus jurisdicciones y a nivel mundial para hacer frente no sólo al cambio climático, sino también a las pérdidas de vidas y los daños económicos que se pueden evitar.